
¿Tienes una plaza nueva donde meter tu vehículo y no hay forma de conseguir un mando nuevo? ¿Cómo puede ser que el mismo mando que en la tienda cuesta entre 30€-35€ y que no logras hacer funcionar, te cueste a través de la comunidad más de 60€? ¿Por qué sucede esto?
En un post anterior, hablábamos sobre los diferentes tipos de mandos de garaje que podemos encontrar en el mercado. Entre ellos destacan: los más antiguos, que son los tipo Quarzt o Cuarzo, los de código Fijo, y finalmente, los que más nos vamos a ir encontrando según pasan los años y hasta que la tecnología avance, que son los Rolling Code o código Evolutivo.
Si alquilas o compras una plaza de garaje o simplemente vas a cambiar la instalación del garaje de tu casa, ten muy en cuenta el sistema del que dispones o el que vas a poner y quién te lo va a hacer. Depende del tipo de receptor que tengas puedes encontrarte que no puedes realizar copias y que la única forma de conseguir un mando es pagando a veces hasta el doble de su valor.
Los mandos Rollig Code son ahora los mandos más avanzados por su dificultad a la hora de que un caco pueda hacer una réplica de tu mando y así entrar en el garaje, pero en esa ventaja se esconden algunas cosillas que utilizadas por un instalador más o menos listo, puede hacer que algo tan sencillo como comprar un mando se torne en misión imposible.
Y es que, para que un mando evolutivo funcione por lo general tiene que estar sincronizado con el receptor, a lo que se llama comúnmente “dar de alta”. La operación es sencilla, compras el mando, vas al garaje y dependiendo de la marca, haciendo una operación u otra, el receptor reconoce el nuevo emisor, lo incluye en su memoria y así podrás disfrutar de un nuevo mando.
Pero cuando la memoria del receptor está llena, ya no se podrán incorporar mandos hasta que no se vacíe o amplíe, y esto es trabajo de un instalador. Otro caso que nos podemos encontrar es que el receptor esté ”capado”, que no es más que el dispositivo se manipula para que nadie ajeno a la instalación pueda dar de alta nuevos mandos.
Si te pasa alguno de estos casos, no te queda otra que fastidiarte y solicitar un mando a la comunidad o a la empresa que lleve el mantenimiento y pagar lo que te pidan.
Pero por lo general, las instalaciones suelen estar bien configuradas y raro es que no puedas darlo de alta tú mismo, además de que en el establecimiento que adquieras el mando seguramente te darán instrucciones exactas de cómo conseguirlo o incluso por un módico precio hay profesionales que acudirán hasta tu garaje y darán de alta el mando.
Nos leemos!